Suenan ya a lo lejos como un eco los pasos,
parte con ellos la abundancia de risas
como frescos racimos recien cortados
que desbordan de entre mis manos.
que desbordan de entre mis manos.
Curva la vista al pasar por tu espalda,
húmedos recuerdos por húmedas tierras bastas.
Es el instante del crédito a voz callada,
del sonido de palabras
como martillos que todo lo aplastan,
como martillos que todo lo aplastan,
hasta la alegría más pura.
Tu ausencia hace más densa la bruma,
más pesado el milagro sobre mis hombros,
más lejana la dicha,
mas repletos los ojos de escombros.
mas repletos los ojos de escombros.
Observa de nuevo las paradas montañas,
hace tiempo detuvieron su alocado avance.
No lo viste? No lo viste hace tiempo?
Deja que la fría noche avance sin miedo,
y observa el nuevo día,
allá a lo lejos...
A los nobles de corazon
allá a lo lejos...
A los nobles de corazon