domingo, 8 de marzo de 2009

Soy...

Te ando siempre detrás, aunque no me veas al volverte, porque hoy solo cobro imagen en tu ausencia, ni tampoco puedas oírme mas que en el eco de tus propias palabras, aquellas que nunca me has dicho. Son mis esperanzas las que te preceden, perdidas a cada quiebro que das en el camino, fuera del que ellas nos pretenden. Te envuelvo, latente e invisible, siempre inmenso, en ocasiones desmerecido y ninguneado por las circunstancias, en otras en un cielo compartido. La pasión que siento nace de tu deseo y se consuma en tu placer.
Soy suma de los amores de cuantos te quisieron…, de cuantos lo harán…


A mi diva.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La suma de tu pasado y del especular de la cadencia de tu paso...

ML

Marcos Padiani dijo...

…avanzando sin tu saberlo por el camino cuyo paisaje se dibuja con los colores de tu alma, desvelando el inevitable resultado a la suma propuesta: la libertad de un presente que ya no importa más que por el inmediato futuro que le sigue…, aquel que tu corazón determine.